PUEBLA.- Luis Efrén Méndez Carmona, un joven de 19 años de edad, se quitó la vida la mañana de este viernes, ahorcándose con el cable del auricular de una caseta telefónica, en plena vía pública de la colonia Miguel Hidalgo.
Minutos antes de las ocho de la mañana, vecinos de la colonia mencionada reportaron al Número de Emergencias 066 el hallazgo de un cadáver en la calle Conspiración de la Profesa y Arboledas,
por lo que más tarde arribaron paramédicos y policías municipales del Sector 1.
El ahora occiso pendía de una caseta de teléfono público, fue identificado pero se desconocen los motivos que lo orillaron a tomar esa decisión.
Cabe señalar que este es el segundo caso registrado en la entidad con estas características.
El domingo 7 de agosto de 2011, Jesús Bañuelos, de 25 años, se ahorcó en una caseta de teléfono ubicada en la 13 Sur y avenida Juárez, luego de discutir con su novia en el bar La Cantini-k, donde ambos ingerían bebidas embriagantes.
Un caso similar ocurrió en Puebla el 7 de agosto de 2011
Con la muerte de Jesús Enrique Bañuelos Lobato, un hombre que discutió con su esposa y decidió suicidarse, en Puebla se suman 136 casos, cifra considerada como alta por el catedrático de la Upaep, Jorge Molina, quien aseguró que este tipo de conductas no sólo son llevadas a cabo por jóvenes y adultos, también por niños, y es consecuencia de un proceso social de desesperanza.
La madrugada de ayer, en la calle 13 Sur y avenida Juárez, fue localizado sin vida al hombre de 29 años de edad, quien vivÍa en el fraccionamiento Bosques del Pilar.
De acuerdo a las diligencias que el Ministerio Público especializado en Homicidios realizó, se logro determinar que el hombre llegó al bar la Cantinik, ubicado en la colonia La Paz, en compañía de su esposa, quien estuvo ingiriendo bebidas embriagantes; y comenzaron a discutir, lo que provocó que Jesús Enrique se retirara.
Minutos más tarde, a unos pasos del Paseo Bravo fue localizado sin vida en una caseta telefónica, al haberse enredado el cable telefónico. Los hechos quedaron asentados en la constancia 309/2011/EH.
Este tipo de conductas y otras que se han presentado entre las personas que han decidió quietarse la vida, se debe, comentó, el catedrático Jorge Molina, a que vivimos en un país donde la violencia se está imponiendo, por las difíciles condiciones económicas, la pobreza y el desempleo.
El académico en Psicología de la Upaep dijo que el divorcio o el abandono de la pareja es el motivo principal para las mujeres, ya que en hombres son contados los casos que se han registrado.
Puntualizó que la responsabilidad de la mujer es mayor, ya que tiene la carga del hogar, los hijos, la alimentación, escolaridad, y los gastos, situaciones que la orillan a tomar esta decisión. En estos casos, los hijos se sienten solos por la ausencia de los padres, lo que los empuja a la violencia o al suicidio.
El especialista puntualizó que es urgente que las autoridades, instituciones, padres de familias, mentores y universidades formen un programa de orientación para que en el momento en que sea detectado un caso sea canalizado a profesionales y se evite el suicidio.
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