2012-08-06 | PUEBLA.- Emulando a las "ladies de Polanco", tres jóvenes que se encontraban bajo los efectos del alcohol terminaron por golpear a un trabajador del volante, luego de que éste las bajó del taxi porque las damiselas le cambiaron en tres ocasiones el lugar de destino, además de que una ellas tomó las llaves del auto de alquiler y las arrojó a las aguas negras del río que pasa por el Puente de México.
Los hechos se reportaron este domingo por la tarde,
cuando tres mujeres que iban muy alegres a seguir la fiesta, solicitaron el servicio de un taxi cuando se encontraban en la calzada Zavaleta y Camino Real a Cholula y le pidieron al chofer de manera inicial las fuera a dejar a una dirección.
Así las tres alegres "damas" borrachas abordaron la unidad del servicio público mercantil marca Dodge Atos, color negro con amarillo, placas 9462-SSE, pero a los cinco minutos las damas decidieron cambiar de parecer y le pidieron al taxista que las dejara en otra dirección.
Al tomar camino para esa nueva orden, las mujeres, aseguró el afectado, iban echando relajo y hablando con palabras altisonantes, pero faltando diez minutos antes de llegar a ese destino, le solicitaron al conductor y propietario de la unidad cambiar de ruta.
Molesto por la actitud prepotente y grotesca de las damas en cuestión, el chofer les pidió que se definieran a dónde querían ir, porque finalmente tenía que verificar que ruta seguir, pero en respuesta, el trabajador empezó a recibir una serie de insultos, mientras éste circulaba por el Puente de México.
Fue justo ahí cuando empezaron a decirle de groserías e intentaron golpearlo, siendo que el taxista trató de defenderse como pudo.
A raíz de ello les pidió que se bajaran porque que no les cobraría por el servicio, pero que ya no las llevaría a ningún lado, pero una de estas damiselas tomó las llaves del auto y se bajo rápido de la unidad, en su enojo las arrojó a las aguas del río que pasa por el Puente de México.
En esos instantes, las dos amigas pararon otro taxi y la que tiro las llaves le hacía la parada a otro ruletero, y cuando pretendía subir a éste y alejarse del lugar, el afectado la tomó por la espalda, la abrazó e impidió que huyera, en ese instante, la joven mujer le asestó un golpe en la cara para que lo soltara y le rompió la nariz. A final de cuentas, el hecho fue observado por un agente de tránsito que se llevó a todos a las oficinas de la policía y tránsito municipal para deslindar responsabilidades.
Los nombres de las "damas" borrachas se ha "manejado" en total hermetismo y se presume que dichas mujeres son respaldadas por personas influyentes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario