Utilizaba pólvora para hacer un pozo
El ahora occiso fue identificado como Noé Alba Flores, quien era vecino de la población de San Nicolás Huajuapan, perteneciente a Huehuetlán El Grande; los resultados de la necropsia confirmaron que murió por traumatismo craneoencefálico severo.
Con relación a los hechos, se sabe que la víctima estaba excavando un pozo en la calle Independencia sin número, del barrio Tierra Blanca en la población de San Juan Atzompa, y para ello utilizaba pólvora. Sin embargo, se excedió de carga y al momento del estallido, una piedra lo golpeó en la cabeza. Sus compañeros de trabajo lo llevaron de inmediato al hospital en cuestión, donde momentos después se reportó su fallecimiento.
La Víctima soldaba un tanque
2012-09-27 | Puebla, Pue.- Un muerto fue el saldo de la explosión registrada este jueves al medio día, en las inmediaciones de la colonia Lázaro Cárdenas, del barrio Santa Anita.
La explosión causó pánico entre los vecinos de ese lugar y ocasionó la movilización del cuerpo de Bomberos y personal de Protección Civil, donde un hombre de 45 años de edad perdió la vida de manera por demás trágica.
Fue al filo de las 12:00 horas de ayer jueves, cuando vecinos de ese barrio escucharon un estruendo, y en un principio se habló que un tanque de gas había explotado justo en el número 906 de la avenida 24 Poniente.
Sin embargo, y a la llegada de elementos de la Policía Municipal adscritos al Sector 4 y la unidad 034 de SUMA, así como personal de Bomberos y Protección Civil Municipal, que tras confirmar el estallido de un artefacto en ese domicilio, se percatan que no se trató de un tanque de gas, sino más bien de una pipa utilizada para transportar combustóleo.
Los hechos se reportaron justo en una empresa con razón social "Distribuidora de Combustible S.A. de C.V. (DICSA), la cual pertenece a la colonia Lázaro Cárdenas del llamado barrio de Santa Anita, donde se logró establecer que el incidente había sido en el taller mecánico de la mencionada empresa.
Ahí, los rescatistas encontraron el cuerpo sin vida de una persona del sexo masculino de 45 años de edad, mismo que fue identificado con el nombre de René Narciso Bautista, el cual fue brutalmente golpeado por la tapa posterior de una pipa que estaba reparando, con placas 741 ED2 del Servicio Público Federal.
Ante esa situación, personal de Bomberos y Protección Civil procedieron a verificar el estado que guardaba el resto de los transportes de esa empresa, con la finalidad de que ninguna de ellas pudiera volar por alguna falla en el sistema de válvulas y compresoras de gas de los contenedores.
Tras dar parte a las instancias ministeriales, las pesquisas iniciales dieron cuenta de que la muerte de esta persona pudo deberse a un error cometido por la misma víctima de esa explosión, al no cumplir con una serie de protocolos antes de iniciar la reparación correspondiente, que al parecer se trataba de una fuga en la llamada boquilla baja del carter, que va conectada al contómetro que llevan en la parte trasera.
ERROR HUMANO, PRODUCTO DE LA EXPLOSIÓN Y TRÁGICA MUERTE
Luego de varias horas de examinar la escena, peritos forenses lograron establecer que fue un error del trabajador lo que ocasionó la explosión y su muerte instantánea, ya que a pesar de que el contendor estaba vacío, esto es ya no tenía residuos de combustóleo, el ahora finado olvidó abrir la válvula para liberar el gas que queda atrapado en el tanque.
Es por ello que confiado, este hombre procedió a trabajar sobre la fuga, usando para ello un soplete con el que pretendía cortar la manguera afectada, pero al momento de iniciar con el corte, la llama de esa herramienta fue lo que produjo la explosión.
Fue así que ante la acumulación de gas que desprende el combustóleo, la tapa trasera de la salchicha voló junto con el empleado al que lo lanzó por los aires hasta proyectarlo con fuerza contra la pared del taller, para después azotar toda su humanidad en el suelo.
El estruendo generó que parte del techo de láminas de ese sitio, en lo particular, se colapsara, así como también resultaran estrellados los vidrios que dan a la calle. El ruido que produjo ese incidente causó expectación y pánico entre los vecinos, que son los que emiten la alerta a los servicios de emergencia, pero más entre los propios trabajadores de la empresa que no sabían a bien, qué había pasado, cuando se acercaron al lugar y vieron el cuerpo inerte de su compañero.
Por su parte, Gustavo Ariza Salvatori, director de Protección Civil en el municipio relató que fue tal el golpe que recibió este trabajador que en su cuerpo quedaron marcados, casi incrustados el cierre de su overol y la silueta de las escaleras que llevan atrás las pipas. "Esta persona debió abrir primero una de las válvulas de escape de ese gas y después proceder a cortar con el soplete, pero al no hacerlo así, provocó su propia muerte, trágica, al explotarle el contenedor".
Debido a una serie de irregularidades que presentó el área de talleres de la empresa en cuestión, esa instancia tuvo que proceder a realizar una clausura temporal del mismo, ya que al parecer no contaba con algunos aditamentos necesarios para la atención de siniestros.
Por otra parte, las diligencias del levantamiento de cadáver de este hombre de 45 años de edad, corrieron a cargo del agente del Ministerio Público de Homicidios, Jorge Antonio Hernández Sucilla, quedando asentado este deceso en la constancia de hechos número 444/2012/AEHOM.
Fue al filo de las 12:00 horas de ayer jueves, cuando vecinos de ese barrio escucharon un estruendo, y en un principio se habló que un tanque de gas había explotado justo en el número 906 de la avenida 24 Poniente.
Sin embargo, y a la llegada de elementos de la Policía Municipal adscritos al Sector 4 y la unidad 034 de SUMA, así como personal de Bomberos y Protección Civil Municipal, que tras confirmar el estallido de un artefacto en ese domicilio, se percatan que no se trató de un tanque de gas, sino más bien de una pipa utilizada para transportar combustóleo.
Los hechos se reportaron justo en una empresa con razón social "Distribuidora de Combustible S.A. de C.V. (DICSA), la cual pertenece a la colonia Lázaro Cárdenas del llamado barrio de Santa Anita, donde se logró establecer que el incidente había sido en el taller mecánico de la mencionada empresa.
Ahí, los rescatistas encontraron el cuerpo sin vida de una persona del sexo masculino de 45 años de edad, mismo que fue identificado con el nombre de René Narciso Bautista, el cual fue brutalmente golpeado por la tapa posterior de una pipa que estaba reparando, con placas 741 ED2 del Servicio Público Federal.
Ante esa situación, personal de Bomberos y Protección Civil procedieron a verificar el estado que guardaba el resto de los transportes de esa empresa, con la finalidad de que ninguna de ellas pudiera volar por alguna falla en el sistema de válvulas y compresoras de gas de los contenedores.
Tras dar parte a las instancias ministeriales, las pesquisas iniciales dieron cuenta de que la muerte de esta persona pudo deberse a un error cometido por la misma víctima de esa explosión, al no cumplir con una serie de protocolos antes de iniciar la reparación correspondiente, que al parecer se trataba de una fuga en la llamada boquilla baja del carter, que va conectada al contómetro que llevan en la parte trasera.
ERROR HUMANO, PRODUCTO DE LA EXPLOSIÓN Y TRÁGICA MUERTE
Luego de varias horas de examinar la escena, peritos forenses lograron establecer que fue un error del trabajador lo que ocasionó la explosión y su muerte instantánea, ya que a pesar de que el contendor estaba vacío, esto es ya no tenía residuos de combustóleo, el ahora finado olvidó abrir la válvula para liberar el gas que queda atrapado en el tanque.
Es por ello que confiado, este hombre procedió a trabajar sobre la fuga, usando para ello un soplete con el que pretendía cortar la manguera afectada, pero al momento de iniciar con el corte, la llama de esa herramienta fue lo que produjo la explosión.
Fue así que ante la acumulación de gas que desprende el combustóleo, la tapa trasera de la salchicha voló junto con el empleado al que lo lanzó por los aires hasta proyectarlo con fuerza contra la pared del taller, para después azotar toda su humanidad en el suelo.
El estruendo generó que parte del techo de láminas de ese sitio, en lo particular, se colapsara, así como también resultaran estrellados los vidrios que dan a la calle. El ruido que produjo ese incidente causó expectación y pánico entre los vecinos, que son los que emiten la alerta a los servicios de emergencia, pero más entre los propios trabajadores de la empresa que no sabían a bien, qué había pasado, cuando se acercaron al lugar y vieron el cuerpo inerte de su compañero.
Por su parte, Gustavo Ariza Salvatori, director de Protección Civil en el municipio relató que fue tal el golpe que recibió este trabajador que en su cuerpo quedaron marcados, casi incrustados el cierre de su overol y la silueta de las escaleras que llevan atrás las pipas. "Esta persona debió abrir primero una de las válvulas de escape de ese gas y después proceder a cortar con el soplete, pero al no hacerlo así, provocó su propia muerte, trágica, al explotarle el contenedor".
Debido a una serie de irregularidades que presentó el área de talleres de la empresa en cuestión, esa instancia tuvo que proceder a realizar una clausura temporal del mismo, ya que al parecer no contaba con algunos aditamentos necesarios para la atención de siniestros.
Por otra parte, las diligencias del levantamiento de cadáver de este hombre de 45 años de edad, corrieron a cargo del agente del Ministerio Público de Homicidios, Jorge Antonio Hernández Sucilla, quedando asentado este deceso en la constancia de hechos número 444/2012/AEHOM.
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